El mismo día (10 de agosto) en que no pudimos ir al Grand Bassin por lluvia, viento y frío (
ver Montes 218), decidimos ir a Les Trois Bassin con mucho calor y humedad. Es lo que tiene una isla como Reunion. Les Trois Bassins con sus respectivas cascadas están situados en un barranco junto a la salida de la autopista hacia St Gilles les Bains y aunque la guía ya advertía que el sitio estaba oficiellement fermé, las informaciones de internet decían que todo el mundo iba a verlos, si no a los tres, por lo menos al que está en medio, el Bassin des Aigrettes que es el que tiene acceso más fácil. En el cartel de prohibido el paso parece haber una pintada racista en la que "ACCES" ha sido sustituido por
Creole Ordures (!)
El parking del snack junto a la carretera estaba a tope de coches y eso que los del bar cobran 2,5 € por aparcar. Nosotros ni siquiera pudimos coger sitio de pago y lo dejamos más abajo en el arcén. Lo prohibido debe de gustar mucho a los criollos y no criollos porque el sendero parecía la Gran Vía:
La zona alta del sendero es seca y áspera pero cuando baja al fondo del barranco se torna tropical. Poco antes de llegar a la cascada des Aigrettes el sendero desaparece y la gente va haciendo equilibrios por uno de los laterales de la acequia de desagüe del bassin. Ante el acúmulo de gente algunos decidían ir por el agua. Ni que decir tiene que entre las rocas que rodean al bassin no había sitio para acomodarse mínimamente, así que nos hicimos la selfie de rigor (¡sin nadie a la vista!)...:
...Y vuelta hacia arriba. En el paso por el borde de la acequia no me atreví a sacar el móvil y hacer una foto no sea que me fuera yo (¡y el móvil!) al agua. Sólo hice una de recuerdo cuando volvía a aparecer el sendero:
Fue el paseo más cutre de cuantos hicimos en la isla. Pero claro está que nos lo ganamos a pulso por meternos donde no nos llaman. En total, el recorrido no tiene más de dos kilómetros y 40+ de desnivel. Esta es la ubicación:
Los otros dos bassins, el de arriba (Malheur) y el de abajo (Cormoran) los dejamos para cuando decidan arreglar los senderos.
