viernes, 23 de octubre de 2020

LAGO Y BORDE DEL PARQUE DE LA RIBERA, Logroño


Hacer un laguito artificial con surtidores cuando pasa un gran río a veinte metros... menuda melonada

Para más inri, ni se puede pasear por la mitad de su perímetro (!). Es como si estuviera de adorno

además de estar acotado por una barandilla tosca, inútil y pesada

Lo que procede es escaparse hacia el borde del río donde algún consistorio sensato decidió echar un poco de asfalto al sendero para que subsistiera.

caminando por el sendero se puede ver el río, e incluso pernoctar (!)

la salida del antiguo molino del Prior no está muy apañada

pero su riachuelo invita a la aventura, es decir , a cruzarlo y acercarse de nuevo al río

qué bonito es el río, y la falda del monte Cantabria; y el otoño

al final el sendero se pierde y hay que volver al parque...

¡no! aún continúa un poco más

y aunque la naturaleza en el parque está domesticada y alineada, el otoño pasa de ello y se muestra igual de orgulloso

Para instruir a mi hija en el Arte del Paseo Deporte y... en el nivel de urbanización de Logroño, la llevo a que vea la conexión del parque de la Ribera con el así llamado "cuarto puente", el que va al polígono de Cantabria.

Curados de espanto, pasamos por la Universidad y vemos que Venezuela ya está aquí

Y para volver con el espanto a casa, damos una vuelta a la "urbanización" de los alrededores de la recién estrenada Escuela de Enfermería. 

Para esto hemos estudiado arquitectura, hija.

mira que no venir en bici, con la de aparcamientos gratuitos que nos han puesto

aquí vine yo al mundo, sí, en este vacío que Pedronez tenga en su gloria

encontrado en una pared

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