Los alrededores de Logroño esconden algunos paseos que casi nadie hace. El del vallecito que viene de los tesos occidentales y llega a la ermita del Cristo, por el que luego se le puede dar la vuelta al teso de los viñedos de Campoviejo, es uno de ellos. Descubierto en el paseo anterior (APD 57) trazo un paseo circular de 6 kms que no tiene desperdicio. Lo hicimos en la tarde ventosa y desapacible del domingo 5 de febrero, pero aún así resultó muy bonito.
Atrás queda Logroño. El fondo del vallecito está lleno de maleza (!):
Hacia delante, el camino serpentea hasta que sale al camino que viene de Valdegastea.
Otra vista del vallecito que vamos dejando atrás. Lástima los postes de la luz porque si no sería de lo más rústico:
Pasamos las instalaciones de jardinería del Ayuntamiento de Logroño, dejamos a la derecha el camino que sube a Campoviejo y seguimos por el camino asfaltado hacia el Cortijo. Al llegar a la entrada del antiguo vertedero tomamos el camino a la derecha y salimos al valle del Ebro con excelentes vistas a La Serna, los polígonos industriales alaveses y al fondo, el Corvo. Una fuerte bajada cementada nos devuelve a Logroño por la ladera norte del teso de los viñedos de Campoviejo.
Como el viento y el frío arreciaban, fuimos a uña de caballo y lo hicimos en poquito más de una hora.
Ah! si! lo peor de este paseo es que en la ermita del Cristo no hay un maldito sitio para dejar el coche. Hay que apañárselas como uno pueda. Grrrr.