Con el lío de que Rosalía había perdido su móvil (se le cayó a la nieve al salir del coche) se me olvidó poner el Suunto hasta la mitad del recorrido. Puse el endomondo para orientarnos en la salida, pero se me paró al poco de salir (grrrr).
Saliendo del bullicioso Yécora hacia la balsa (había niños urbanos gritando como nunca)
Enseguida nos quedamos solos y fuimos abriendo huella
Ni que estuviéramos cruzando la Antártida
Yo estrené reyes: el plumas Simond, como para ir al Makalu
Cartel explicativo de la balsa (qué fea queda la valla)
Un bonito paso entre pinos por debajo de la balsa
Se abrieron las nubes y salió el sol
Preciosa subida a la ermita de Bercijana
Recinto de la ermita (con juegos infantiles, ahhh, aunque por lo menos están detrás del seto)
En la ermita descubrimos un sendero por el pinar con chozo y todo
Por esta parte estaba más pisado
El León Dormido no llegó a despejarse del todo
Pero tiré de zoom e hice esta foto de La Población
Selfie al llegar a Yécora por abajo
La última foto para la subida a la iglesia
No hay comentarios:
Publicar un comentario